Recuerdo que cuando dijeron que harían una película sobre Freddie Mercury y anunciaron que Sacha Baron Cohen (el comediante que dio vida a Borat) haría el papel, quedé intrigado con el proyecto. Cohen ya había demostrado que podía cantar en “Sweeney Todd: The Demon Barber of Fleet Street” (2007) y “Les Misérables” (2012), aparte de que verlo en un rol más serio me resultaba una propuesta interesante.
No obstante, eso quedó en nada. Tiempo después anunciaron que el actor californiano de padres egipcios Rami Malek estaría encarnando a la legendaria estrella del rock. Malek se estrenó en la pantalla grande en la comedia “Night at the Museum” (2006), en donde interpretaba al faraón egipcio Ahkmenrah.
En tiempos recientes, es mejor conocido por su rol protagónico en la serie “Mr. Robot”, y ahora, después de “Bohemian Rhapsody”, será reconocido por su interpretación del vocalista de la banda británica Queen.
El filme “Bohemian Rhapsody” celebra a Queen, su música y su extraordinario cantante Freddie Mercury. Freddie fue una figura que rompió esquemas y se convirtió en uno de los artistas más queridos del planeta. La película traza el salto a la fama de la banda mediante sus icónicas canciones y sonido revolucionario. Mientras que por un lado retrata el éxito de la agrupación, por otro muestra los tiempos más tumultuosos en la vida de Mercury y cómo esto marcó la historia del grupo. Más allá de esto, es un testimonio del poder de su música y el legado de una de las bandas más influyentes.
La narrativa es fluida y en ningún momento llega a sentirse lenta o aburrida. La cinematografía es funcional, pero mejor está el trabajo de edición, que hasta humor le añade al filme poniendo tomas adecuadas en momentos perfectos.
El director Bryan Singer, quien ha dirigido cuatro filmes de los X-Men, trabajó durante año y medio en la película antes de ser despedido tras ausentarse con frecuencia del set y sin dar explicaciones, aparte de tener acaloradas discusiones con el protagonista –un tipo agradable y tranquilo, comentan muchos– según The Hollywood Reporter. En sustitución de Singer, Fox contrató a Dexter Fletcher, director de “Eddie the Eagle” (2015), para filmar las últimas semanas de la producción. Singer fue acreditado como director, pero Fox le quitó el título de productor.
Detrás del proyecto está el productor Graham King, que trabajó por años para llevar la historia de Freddie Mercury a la pantalla grande y logró ganarse el favor de los miembros vivientes –el guitarrista Brian May y el baterista Roger Taylor–, quienes aportaron bastante en la visión del filme y como referencias. Quizás por esto es que también juegan un rol más prominente que el del bajista John Deacon. Aunque presentan a la banda experimentando con sonidos en el estudio, me hubiese gustado ver más sobre cómo Brian May consiguió su sonido tan particular, que se siente como una clara influencia en bandas más contemporáneas como Muse.
“Bohemian Rhapsody” nos lleva a conocer un poco más a Freddie, en parte a través de los ojos de sus compañeros de banda. La película está catalogada PG-13. Ciertamente, pudo haber sido mucho más oscura y quizás ser catalogada R, pero no era lo que se buscaba del filme. No se concentra en el uso de drogas ni en la muerte de Mercury en 1991.
Sí presenta algunos aspectos negativos de la agrupación, pero lo hace de forma bien superficial. No se exceden en mostrar consumo de drogas y hasta el tema de infidelidades a veces solo queda en insinuaciones.
El escogido de canciones es excelente, aunque Queen tiene tantos éxitos, que no todos cupieron en la cinta. La música que se escucha en el filme es una mezcla de Malek cantando, con pistas originales de la voz de Mercury y la voz del cantante Marc Martel, quien puede cubrir con destreza el alcance vocal de Freddie, de acuerdo a Vanity Fair.
Me hubiese gustado además que incluyesen en el relato la colaboración que hicieron con otro titán de la música, David Bowie, quien el mismo Mercury aseguraba que era su amigo, como queda plasmado en esta entrevista:
La inclusión del comediante Mike Myers en el filme queda justificada tras su aportación a la emblemática escena del karaoke en el carro en “Wayne’s World” (1992), que comparto a continuación:
Esta secuencia hizo que la canción “Bohemian Rhapsody” alcanzara el segundo lugar en la lista de los Billboard Hot 100 en marzo de 1992 (“Wayne’s World” estrenó el 14 de febrero de 1992).
En contraste, al actor –fanático de Queen– esta vez le toca hacer el papel de un ejecutivo de la disquera que no estaba contento con la visión creativa de la agrupación, lo cual resulta irónico dado a su participación en la historia de Queen, y precisamente, la canción “Bohemian Rhapsody”.
Si algo me costó procesar fue la prótesis dental del protagonista. Los dientes, idea de Malek, me parecían muy exagerados y poco naturales. No es hasta que llega al tiempo en que Freddie usaba bigote, que deja de ser una distracción.
Hablando de dientes, Mercury sí tenía una dentadura particular. Sus dientes frontales sobresalían hacia el frente, a causa de cuatro dientes extras que los empujaban. En la película, el personaje alega que al tener más espacio en la boca, podía tener un registro vocal más amplio. Dice el documentarista austriaco Rudi Dolezal: “Quizás todos nos preguntamos,’Un tipo que era así de adinerado, ¿por qué no se arregló los dientes?’ Él tenía mucho miedo de que si cambiaba sus dientes, el sonido particular de su voz se perdería. Así que estaba más preocupado por su voz que por su apariencia, y pienso que eso dice mucho sobre este hombre”.
Fuera de eso, me parece que Rami Malek hizo un excelente trabajo dándole vida a Freddie, y aparte de la banda sonora y documentación histórica, es una de las razones que hacen que la película valga la pena. Otros que completan el elenco son Lucy Boynton, Ben Hardy (como Roger Taylor), y Gwilym Lee como Brian May (que también se parecía bastante).
La presentación final de la banda en el filme es sencillamente impresionante. Te lleva a vivir la experiencia de lo que probablemente sería estar en un concierto multitudinario de Queen.
Sobre la vida personal de Mercury, le da bastante importancia a Mary Austin (Boynton), la novia que tuvo durante su juventud y cuya amistad conservó a lo largo de su vida. Mercury murió a los 45 años a causa de neumonía bronquial, una complicación que enfrentó años después de contraer SIDA.
Si quieres conocer más sobre este ícono del rock y la agrupación Queen, no debes perderte “Bohemian Rhapsody”. Estrenó hoy, así que ya tienes algo que ver –y escuchar– este fin de semana. Viene, ¿ahora quién se atreve a hacer la película de los Beatles?
Estudio: Twentieth Century Fox
Director: Bryan Singer, Dexter Fletcher
Historia: Anthony McCarten y Peter Morgan
Guión: Anthony McCarten
Clasificada: PG-13
Duración: 2:14
Calificación: 4.5/5