Reseña: Crimes of the Future – ‘Body Horror’ futurista

Hay cosas en la vida que no son aptas para cardiacos: lanzarte de paracaídas, montarte en una montaña rusa salvaje, tirarte en un ‘zipline’ interminable y… definitivamente, ver una película de David Cronenberg.

Cronenberg es un director cinematográfico conocido como el “maestro del ‘body horror’”, subgénero del cine de horror en el que se muestran transformaciones y mutilaciones deliberadamente grotescas y psicológicamente perturbadoras del cuerpo humano. En otras palabras, el espectador debe prepararse para un espectáculo que puede resultar desafiante.

Aunque las imágenes en este típo de cine pueden ser difíciles de ver para algunos, no dejan de tener un propósito particular en los temas que desea explorar el cineasta. Cronenberg ha logrado gran reconocimiento en el arte por su constante interes en “crear una identidad” en la que las transformaciones físicas reflejan el estado psicológico de sus personajes y el impacto que tiene la evolución tecnológica de su entorno. Si bien muchas de sus películas pasadas se destacan por estos elementos, Crimes of the Future parece ser una obra en la que su voz, su estilo visual y los temas que toca encuentran una de sus máximas expresiones.

Situada en un futuro distópico donde el dolor físico es prácticamente cosa del pasado, Crimes of the Future presenta a una raza humana que sufre nuevas clases de transformaciones y mutaciones con el fin de adaptarse al entorno sintético que la rodea. Es un mundo en el que el arte y la intimidad encuentran su expresión en procesos quirúrgicos.

Viggo Mortensen protagoniza el filme como Saul Tenser, un artista de interpretación con una rara mutación en la que su cuerpo desarrolla más órganos de los que necesita. Esto lleva a Saul y a su amante y compañera Caprice (Léa Seydoux) a realizar espectáculos donde hacen operaciones de cuerpo abierto para extraer los órganos ante el asombro de sus seguidores y miembros de la prensa. Saul es muy famoso por esto, lo que lo convierte en el blanco de un grupo que quiere usar su fama para revelar al mundo el posible nuevo salto evolutivo para los humanos.

A pesar de las imágenes claramente grotescas que presenta y la historia sombría que muestra de este mundo insensible y en ruinas, Crimes of the Future no deja de ser una obra fascinante y muy relevante en estos tiempos. El progreso tecnológico que hemos vivido y seguimos experimentando parece cada vez más entrar en conflicto con nuestra propia biología. Mientras, nuestra expresión artística parece cada vez moverse más a extremos para complacernos como un público cada vez mas incrédulo de lo que ve. Estas son realidades de nuestra sociedad que esta película discute, pero con el toque grotesco y visceral que caracteriza a su creador.

Mira el tráiler aquí.