Hombres vs. máquinas: una de esas posibles culminaciones de la humanidad en el mundo de la ciencia ficción. Y en la primera fila, está Terminator, aunque ahora que van por la sexta película, quizás debería llamarse Continuator.
En “Terminator: Dark Fate”, han pasado más de dos décadas desde que Sarah Connor evitó el Día del Juicio, alterando el futuro y cambiando el fatídico destino de la humanidad. Ahora conocemos a Daniela Ramos (Natalia Reyes), quien lleva una vida sencilla en Ciudad de México junto a su hermano (Diego Boneta) y su padre (Enrique Arce, “Arturito” en “La Casa de Papel”), hasta que un Terminator Rev-9 (Gabriel Luna) viaja en el tiempo para matarla. Para Dani poder sobrevivir, tendrá que unir fuerzas con dos guerreras: Grace (Mackenzie Davis), una súper soldado del futuro, y la mismísima Sarah Connor (Linda Hamilton), quien tiene vasto conocimiento en el tema de los Terminators. Y claro, sus posibilidades mejoran cuando un clásico T-800 (Arnold Schwarzenegger) también se ofrece a ayudarlas.
La historia que vemos en este sexto filme de Terminator es un borrón a “Terminator 3: Rise of the Machines” (2003) y todo lo que vino después, incluyendo la última “Terminator Genisys” (2015), a la que para aquel entonces describimos como “un queso suizo de ciencia ficción”. Con un panorama así, es entendible que quisieran reescribir la historia.
Cuando inicia la acción, me pareció que las primeras dos secuencias eran demasiado rápidas, debido a un excesivo movimiento de cámara y de cortes en la edición, pero luego mejora. “Dark Fate” tiene mucha acción, bastantes escenas de persecuciones y una amplia cantidad de explosiones, así que si vas en busca de acción, es posible que salgas complacido. Aunque sí, a veces se le va la mano con las ‘peladas’.
La narrativa fluye dentro del contexto del filme, y hace un buen balance entre acción y pausas, donde aprovecha para incluir algo de humor en ocasiones. Respecto a lo emotivo, pudo haber estado mejor, pues aunque tiene sus partes emotivas, no conmueven mucho. Pero esto no es lo que la gente busca de una película de Terminator… ¡La gente quiere ver robots que no mueren y acción, mucha acción! Y por esa parte, “Dark Fate” cumple la entrega muy bien.
Las actuaciones funcionan, pero reconozco que choca un poco cuando ves más carisma de parte de un robot (Schwarzenegger) que de una humana mejorada físicamente (Davis). Por otra parte, quería mencionar que las capacidades del modelo Rev-9 de Terminator son muy buenas.
Me gustó también que le dieran importancia a México y a los inmigrantes en la historia, pues es algo que en cuanto a relevancia, conecta la historia a nuestros tiempos, gracias a Trump y sus vergonzosas políticas.
“Terminator: Dark Fate” presenta una mejoría considerable ante las últimas secuelas, pero eso quizás no diga gran cosa para muchos, considerando la calidad de los pasados filmes. Cumple muy bien su función de entretener con suficiente acción y efectos visuales para saciar a aquellos que entrarán a la sala buscando ver acción. Consejo a quien vaya a verla: la mejor forma de disfrutarla es yendo con expectativas bajas (algo a lo que Genisys aportó mucho).
Estudio: Paramount Pictures
Director: Tim Miller
Historia: James Cameron, Charles H. Eglee, Josh Friedman, David S. Goyer y Justin Rhodes.
Guión: David S. Goyer, Justin Rhodes y Billy Ray.
Duración: 2:08
Clasificada: R
Género: Acción/Aventura/Ciencia Ficción
Calificación: 3.75/5